"Salió a las 9 de la mañana de la casa y dijo que se iba a encontrar con un amigo", afirmó Rafael Herrera, padre del hombre hallado muerto con cuatro disparos en el pecho, en una trocha de la vereda Todo Fierro, en jurisdicción de Juan de Acosta. 

El hombre estaba en la mañana de este jueves afuera de la sede de Medicina Legal explicando que a su hijo lo dejaron abandonado con la cédula de otra persona y por eso estaba "con la identidad que no es".

La Policía del Atlántico había informado que se llamaba Ricardo José Jiménez Gómez, porque era el documento que encontraron cerca del cadáver, a las 3 de la tarde del miércoles. Sin embargo, el padre de la víctima aclaró que su nombre era Alfredo David Herrera De la Rosa y que le había dejado la billetera antes de salir.

El hombre indicó que su últimamente su hijo se dedicaba a mototaxista o cobradiario, que vivía en unión libre y deja cinco hijos menores de edad.

Según el padre, la víctima fue vista por última vez en el sector de la avenida Las Torres con un parrillero y que su motocicleta no aparece, al igual que los dos celulares que usaba.

El hombre considera que fue ese supuesto amigo el que llevó a Alfredo David a Juan de Acosta y le disparó cuatro veces en el pecho, porque "él nunca cogía para allá".

Una de las cosas que más le dolió a Rafael Herrera fue enterarse de que su hijo murió "con un crucifijo en la mano, como si hubiera estado suplicando que no lo mataran, que lo dejaran con vida".